Alejandro Alloatti, uno de los que sigue en las filas peñarolenses.
Alejandro Alloatti y Peñarol van por una nueva oportunidad juntos. “Elegí quedarme porque me siento cómodo en la ciudad y el ambiente del club. También porque quería terminar jugando el año pasado. La lesión del hombro me tomó de sorpresa y me dolió no terminar en la cancha.
Quería tener una especie de revancha”, dijo el experimentado interno, que se perdió el tramo final de la última temporada.
En esta preparación Alloati sufrió un problema muscular que ya quedó atrás. “La pretemporada es dura y exigente. Estamos haciendo muchos trabajos con el profe (Matías Amodio) y Osvaldo (Echevarría), más la parte de básquet con el cuerpo técnico. Después de un receso el cuerpo lo siente y yo estuve unos días con una sobrecarga muscular, pero ya estoy haciendo los entrenamientos completos. El equipo se está preparando de buena forma”, señaló.
Con respecto a su lesión en el hombro, explicó: “Fue lenta la recuperación y me agarró en el receso, entonces dejé todo. Eso me sirvió para que el hueso suelde bien, pero después me costó recuperarme, tuve tendinitis y algunas molestias. Por suerte ya lo estoy superando”.
Sobre el nuevo Peñarol, Alloatti sostuvo: “Me gusta el equipo. Vamos a ser intensos, a defender duro y correr mucho. El grupo humano es bárbaro, nos llevamos bien y hay buena onda, más allá de la típica competencia. El grupo arrancó bien”, dijo.
“Los chicos están listos -continuó-, me alegra que vayan a tener más lugar. Estoy seguro de que estarán a la altura. En cuanto a las incorporaciones, me gusta cómo juegan todos y lo que aportan. Cuando venga Maxwell, por sus características, va a encajar perfectamente y esperemos que se amolde rápido a lo que es la Liga”.